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ahorro energetico

Ahorro energético ¿Qué es y por qué es tan importante?

 

¿Qué es el ahorro energético?

 

El ahorro energético es la clave de cara a contribuir para conservar el medioambiente y el desarrollo sostenible. Hoy en día la energía eléctrica participa activamente en la mayoría de tareas que ejecutamos en nuestra rutina, lo que significa que tenemos un rol protagonista en el consumo eléctrico. ¿Y qué debemos saber para entender mejor el significado de consumo eléctrico?

el ahorro energetico

Pues debemos saber que hay fuentes de energía que se agotan, y se las denomina no renovables, debido a que son limitadas en la naturaleza. Pero no solo eso, el medioambiente también se ve afectado por el impacto de los modos de transporte de energía, extracción y su posterior consumición.

Por lo tanto, podemos asumir que para realizar un consumo correcto y responsable de la energía, hay que ser conscientes de lo importante que es fomentar un desarrollo sostenible y el ahorro energético para la contribución de conservar el medioambiente.

¿Y cómo ahorro energía correctamente? Antes debemos saber que la modernización del estilo de vida de las personas ha traído, en consecuencia, gran cantidad de electrodomésticos y otros aparatos electrónicos del hogar que sirven para facilitarnos la vida.

Lo que significa, que el primer paso es cambiar a mejor pequeños hábitos en nuestra rutina diaria que afecten directamente al ahorro energético, entre otros. Sumado al aprendizaje de cómo utilizar los elementos eléctricos del hogar de manera eficiente.

 

Consecuencias reales del ahorro energético

 

Cuando ahorras energía, estás contribuyendo activamente en la interrupción del ciclo de contaminación del medioambiente que tanto nos afecta. ¿Cómo se da esa interrupción? Sencillo; debido al ahorro se usa menos combustible, lo que disminuye la emisión de gases a la atmósfera, que al mismo tiempo reduce la contaminación.

No solo ayudamos al medioambiente, además, ayudamos a preservar las reservas de carbón y petróleo, y cuidamos nuestra economía ahorrando en el gasto de electricidad y luz en el hogar.

 

La importancia del ahorro energético

 

Las metas a alcanzar son; primera, ser conscientes a nivel individual del peso que tiene el ahorro energético cuando se realiza como se debe, y segundo, concienciar al resto de personas sobre el cuidado medioambiental y el ahorro energético, en pos de mejorar la gestión de recursos y la calidad de vida.

Acciones como la reducción del consumo eléctrico en los hogares, provocará por consiguiente que el coste de las facturas se reduzca y que nuestro impacto ambiental sea menor, convirtiendo nuestras casas en lugares más eficientes y sostenibles.

A continuación, trataremos que puntos podemos tener en cuenta para empezar a mejorar la eficiencia de nuestro ahorro energético, y su efecto en distintos sitios.

En casa

 

Vamos a repasar algunas maneras de mejorar nuestro ahorro energético en el hogar, sobre todo teniendo en cuenta que los electrodomésticos suponen casi la mitad del gasto energético de la casa. Un ejemplo claro de esto es la renovación de los electrodomésticos que queramos sustituir, ya sea por cuestiones de mejora o de reparación.

Para elegir un nuevo electrodoméstico que mejore el ahorro energético, debemos tener en cuenta cuáles son sus características energéticas.

¿Cómo podemos identificar esas características? Con las etiquetas energéticas, que muestran los niveles del consumo de energía de los aparatos en siete niveles distintos; desde la A que se asocia al color verde, hasta la G, que se asocia al color rojo.

La medida de implementar etiquetas energéticas a los diferentes aparatos, se estableció para fomentar el desarrollo sostenible y el ahorro de energía.

etiqueta energetica

Otra vía para el ahorro es enfocarse en reducir los gastos que provoca el uso sin control de la iluminación. En vez de depender de manera continua de nuestras lámparas, podemos aprovechar al máximo la luz natural durante el día.

Cuando sea necesario la utilización de la luz artificial, podemos optar por lámparas de bajo consumo (que son fluorescentes convencionales o compactas), o luces LED, rechazando las bombillas alógenas que destacan por tener un mayor consumo.

Para iluminar estancias o espacios grandes es recomendable usar una lámpara de buena potencia, en vez de apostar por muchas lámparas más pequeñas.

En el trabajo

 

En el ámbito laboral se aplican situaciones muy similares al hogar, debido a que recae mucho en el empleo diario de aparatos electrónicos e iluminación. Evidentemente, los trabajos son variables y no existe una medida concreta de cara a mejorar el ahorro energético con un electrodoméstico específico, pero sí se pueden abarcar rasgos generales a valorar.

consecuencias del ahorro energetico

Muchos empleos requieren de aparatos electrónicos, que se traduce en consumo energético, así que vamos a explicar cómo mejorar el ahorro en este caso.

La mayoría de estos aparatos tienen un sistema de stand by, que les hace permanecer continuamente enganchados a la corriente, generando un gasto pasivo en el consumo. Esta situación se puede resolver activando en esos dispositivos los modos de ahorro, o el temporizador para que se apaguen las pantallas cuando el aparato no recibe actividad en un plazo determinado de tiempo.

 

En la vía pública

 

En la vía pública, las mejoras deben estar enfocadas a la sustitución de elementos que consumen muchísima energía, por otros que cumplan la misma función vial, pero incrementen el ahorro de la misma. Por ejemplo, cambiar las lámparas de descarga de vapor de mercurio convencionales, por otras de vapor de sodio y la instalación de luces LED.

Otra alternativa para el ahorro es establecer un arco de tiempo durante la madrugada, en el que se apaguen la mitad de las farolas, dejando así encendidas las estrictamente necesarias para mantener una buena luminosidad.

 

Diferencia entre ahorro y eficiencia energética

 

El ahorro de energía consta de reducir el consumo de energía gracias a unos hábitos que estimulen esa acción de ahorro, lo que se puede traducir en reducir el confort personal en algunas partes, o la velocidad de los servicios y la producción si lo enfocamos en el nivel industrial o de empresa.

Disminuir el uso de la calefacción o el aire acondicionado pueden ser ejemplos de como llevarlo a cabo, pero no es una solución recomendable a largo plazo si se busca únicamente efectividad.

En cambio, la eficiencia energética trata de reducir el consumo de energía (aunque en menos proporción que un plan de ahorro normal), pero intentando no entorpecer el confort, la velocidad de los servicios y la producción.

No busca cambiar sin más los hábitos de consumo, sino de adaptar ciertas medidas y sistemas para lograr una reducción máxima de la energía final consumida. Hace un empleo responsable de los recursos y reduce las emisiones de CO₂.