La obsolescencia programada de las bombillas es real. Estos elementos han sido objeto de la obsolescencia programada en el pasado, aunque no se les considera los primeros en sufrirla (al contrario de lo que se piensa popularmente).
Esta práctica ya ha sido aplicada en una variedad de productos de consumo, entre los que se incluyen los artículos de moda, electrodomésticos y dispositivos electrónicos, todo con el objetivo de fomentar el consumo continuo y la sustitución de productos.
A continuación, vamos a repasar las razones de que la obsolescencia programada sea tan utilizada en diferentes productos, cómo se aplicó a bombillas y mucho más. ¡Vamos allá!
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¿Qué es la obsolescencia programada?
La obsolescencia programada es una estrategia empresarial en la que los fabricantes diseñan y producen deliberadamente productos con una vida útil limitada o una funcionalidad limitada.
El objetivo de esta práctica es impulsar la demanda de los productos del sector donde la ejecutan, al hacer que los consumidores los reemplacen con mayor frecuencia.
Pese a que la mayoría conocen el concepto de obsolescencia programada, no saben que existen varios tipos:
- La obsolescencia funcional ocurre cuando un producto se vuelve inutilizable o menos eficiente debido a un diseño deficiente, piezas de baja calidad o falta de soporte técnico.
- La obsolescencia estética se refiere a la creación de productos que se vuelven obsoletos debido a cambios en la moda o al deseo de tener el último modelo.
- La obsolescencia tecnológica ocurre cuando los avances tecnológicos hacen que un producto quede desactualizado rápidamente.
La obsolescencia programada ha generado numerosos debates en términos de sostenibilidad y consumo responsable. Las personas que se posicionan en contra argumentan que promueve el consumo excesivo, aumenta la generación de residuos y tiene un impacto ambiental realmente negativo.
Por otro lado, algunos defensores argumentan que la obsolescencia programada impulsa la innovación y el progreso económico.
En cuanto a la obsolescencia programada de las bombillas, también ha sido un objetivo de debate constante a lo largo de la historia.
¿Por qué la obsolescencia programada en bombillas?
Para comprender un poco mejor en las circunstancias de la aplicación la obsolescencia programada en bombillas, es necesario hablar de Phoebus.
¿Qué es? En 1924, se estableció el cártel Phoebus en Ginebra, el primer acuerdo global secreto entre fabricantes de bombillas para controlar la producción y repartirse el mercado.
Su objetivo era reducir la vida útil de las bombillas y fomentar compras frecuentes. Se formó el Comité de las 1.000 horas de Vida, que obligaba a los fabricantes a cumplir con esta norma mediante un estricto control de calidad.
Esto causó que, en poco tiempo, la duración de las bombillas se redujera significativamente. Aunque surgieron nuevas bombillas duraderas, ninguna llegó al mercado debido a la influencia continua del cártel, el cual cambió de nombre a lo largo del tiempo.
Ahora que conocemos este ejemplo, que demuestra perfectamente la idea de imponer esta práctica, podemos determinar el porqué de las bombillas.
Una herramienta para impulsar ventas
Como ya hemos dicho, la obsolescencia programada se utilizó en las bombillas con el fin de impulsar las ventas y mantener el flujo constante de ingresos para los fabricantes.
Phoebus no fue un caso aislado, existieron diferentes grupos y empresas cuyo objetivo era controlar la producción de bombillas y asegurarse de que los consumidores compraran con regularidad, evitando que las bombillas tuvieran una vida útil prolongada
Que un producto dure mucho tiempo se traduce en una pérdida de ventas, convirtiéndose automáticamente en una desventaja económica para los fabricantes.
Mediante la reducción de la vida útil de las bombillas, muchas entidades buscaban garantizar la demanda continua de los consumidores, obligándolos a reemplazar las bombillas con mayor frecuencia.
Además de proporcionarles las ventajas que ya hemos comentado, esto les permitía mantener una cuota de mercado sólida y maximizar sus beneficios a largo plazo.
A veces, a través de normas y multas, llegaban a ejercer un control riguroso sobre otros fabricantes para garantizar que se cumpliera la duración establecida de las bombillas, afectando de manera significativa a la vida útil de las mismas.
¿Existe la obsolescencia programada en bombillas actualmente?
En la actualidad, hay todo tipo de opiniones y debates en torno a la presencia de la obsolescencia programada en las bombillas.
La razón de que algunos argumenten que ciertos fabricantes aún diseñan bombillas con una vida útil limitada es debido a la existencia de las bombillas de baja calidad o de menor duración que se encuentran en el mercado.
Aun así, es crucial destacar que en los últimos años ha habido muchos avances significativos en la tecnología de iluminación, gracias a la evolución tecnológica.
Las bombillas LED, por ejemplo, son conocidas por su mayor eficiencia energética y vida útil prolongada en comparación con las bombillas incandescentes tradicionales. Son una prueba de que los avances han permitido el desarrollo de bombillas más duraderas y eficientes, que colateralmente ha disminuido la necesidad de reemplazo frecuente.
Además, los cambios en las políticas gubernamentales y las demandas de los consumidores han impulsado un enfoque creciente en la sostenibilidad y la durabilidad de los productos. Cada vez más, los consumidores buscan opciones de iluminación de mayor calidad y vida útil extendida, propiciando la posibilidad de un mercado más diverso y a la disponibilidad de bombillas de mayor duración.
En resumen, aunque la obsolescencia programada puede estar presente en algunas bombillas de baja calidad, también existen opciones duraderas y eficientes en el mercado, y hay una mayor conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad y la durabilidad de los productos.