¿Cómo se obtiene la biomasa? Esa pregunta es habitual en aquellas personas que están empezando a descubrir el mundo de las energías renovables, sobre todo en el ámbito de la energía y fuentes de biomasa.
A continuación, vamos a responder esa pregunta punto por punto, de manera que puedas aprender los diferentes procesos que se llevan a cabo para lograrlo, mientras añadimos algo de información extra que complemente los apartados.
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Fuentes de las que se obtiene biomasa
Antes de lanzarnos directamente a la explicación de los procesos de producción, debemos conocer las fuentes más comunes de las cuales se obtiene la energía de biomasa. Son las siguientes:
- Plantas: La biomasa se puede obtener de cultivos energéticos como el maíz, la caña de azúcar, el trigo, la remolacha y la soja, entre otros. También se puede obtener de bosques, praderas y plantas acuáticas.
- Residuos agrícolas: Es posible aprovechar incluso los residuos agrícolas, como la paja de trigo, la cáscara de arroz, las hojas de maíz o los restos de poda.
- Residuos forestales: Elementos como la madera y los residuos forestales, o las ramas, las hojas y la corteza son otra de las opciones de las que se consigue energía.
- Residuos de la industria alimentaria: Gracias a la gran producción de la industria alimentaria, hay un montón de residuos aprovechables como los restos de frutas y verduras, los desechos de la producción de aceite y la pulpa de remolacha.
- Residuos urbanos: La biomasa se puede sacar también de los residuos urbanos, como la basura orgánica y los residuos de jardín.
- Residuos de la industria papelera: Otro lugar donde se encuentran muchos residuos para utilizar es la industria papelera, que posee la pulpa de papel y los residuos de la producción de papel.
Proceso de obtención de biomasa
Ahora que ya conoces las fuentes más explotadas, es hora de saber cómo se obtiene la biomasa.
Pese a que el proceso puede variar según la fuente de la que se consigue, existen determinadas etapas generales. Te las mostramos a continuación:
- Recolección: En el caso de la biomasa obtenida de plantas, la primera etapa consiste en la recolección de las partes de la planta que se van a emplear, como tallos, hojas, ramas o frutos.
En el caso de la biomasa obtenida de residuos agrícolas, la recolección se realiza después de la cosecha. - Transporte: Después de la recolección, la biomasa se transporta a una planta de procesamiento o a una instalación de almacenamiento.
- Preparación: En la instalación de procesamiento, la biomasa se prepara para su uso, lo que puede implicar limpiarla, secarla o triturarla para reducir su tamaño y facilitar su manejo.
- Conversión: El siguiente paso es convertir la biomasa en una forma utilizable. Esto puede implicar la combustión de la biomasa para generar energía térmica, la fermentación para producir biocombustibles líquidos, o la producción de biogás a través de la digestión anaerobia.
- Almacenamiento y distribución: Después de la conversión, la biomasa se almacena y se distribuye para su utilización en diferentes aplicaciones, como la generación de electricidad, la calefacción o el transporte.
Métodos de conversión para obtener biomasa
Obtener biomasa requiere una serie de métodos de conversión, por lo que una explicación general del procedimiento de producción no es suficiente. Vamos a exponer los más importantes y las diferencias que existen entre cada uno.
En total, son cuatro principales estrategias que convierten la biomasa forestal y otras variantes en energía. Normalmente, utilizando procesos físicos como la transformación termoquímica, la conversión química o la conversión biológica.
Procesos físicos (combustión directa)
La combustión directa es la estrategia más conocida y utilizada. El proceso es sencillo; se realiza una quema de biomasa con la finalidad de generar calor.
De esta manera, podemos calentar todo tipo de espacios, mayormente casas y edificios. Los elementos más conocidos para cumplir con esa tarea son las estufas de leña.
Conversión termoquímica (pirólisis y gasificación)
La conversión termoquímica tiene dos variantes, por lo tanto, es necesario hablar de ellas por separado para exponer sus diferencias.
- Gasificación: Transforma diferentes tipos de biomasa sólida en un gas combustible a través de un calentamiento en altas temperaturas, con el pequeño detalle de que se controlan las cantidades de oxígeno.
- Pirólisis: Al contrario que la primera técnica, en este caso se transforma la materia orgánica en productos sólidos, líquidos o gaseosos, no tiene límite de forma. La atmósfera debe poseer muy poco oxígeno y el producto final se dirige hacia la generación de electricidad, calefacción, carbón vegetal, aceite, diésel renovable, metano e hidrógeno.
Conversión química (fermentación)
La fermentación es otra respuesta a cómo se obtiene la biomasa, pues este proceso es capaz de transformar el azúcar en ácidos o alcohol mediante bacterias y levaduras específicas. La intención de este proceso es generar biodiésel.
Conversión biológica (digestión anaeróbica)
Llegamos a la última práctica utilizada, donde los microorganismos participan para descomponer el material biodegradable debido a la falta de oxígeno. El resultado es biogás (compuesto por C02 y CH4) y algunos fertilizantes líquidos.
Los productos obtenidos se pueden usar en la cocina o para generar electricidad.
Artículos relacionados con la producción de biomasa
Para terminar, creemos que es importante que conozcas los artículos del BOE (Boletín Oficial del Estado) relacionados con la obtención de biomasa y su producción.
- Real Decreto 661/2007, de 25 de mayo, por el que se regula la actividad de producción de energía eléctrica en régimen especial: Este real decreto establece el régimen jurídico y económico aplicable a la producción de energía eléctrica a partir de fuentes renovables.
- Real Decreto 1/2016, de 8 de enero, por el que se aprueba la revisión de la tarifa eléctrica: Este real decreto establece las tarifas eléctricas aplicables a la producción de energía eléctrica a partir de fuentes renovables, incluyendo la biomasa.
- Ley 8/2015, de 30 de octubre, de fomento de las energías renovables y la eficiencia energética de Andalucía: Esta ley establece medidas de fomento y promoción de las energías renovables, en la comunidad autónoma de Andalucía.